adaptaciones y costumbres

Y que a todo nos acostumbramos menos al trabajo a no comer

Según nuestra forma de ver las cosas, hasta a lo malo llegamos a acostumbrarnos ¿o no?, claro que no estamos diciendo que sea bueno que al segundo golpe que te haga tu pareja ya estarás acostumbrada y ni te dolerá, mucho menos que vamos a permitir que nos levanten la mano eh chicas. Simplemente que dependiendo de lo que se trate podemos adaptarnos a hacer diversos cambios, desde la forma de hablar, de vestir, de vivir, de caminar, y hasta a esa costumbre/adaptación ligada a las cosas materiales, porque si bien son cosas que vas haciendo automáticamente, como el meter la ropa a la lavadora apretar un par de botones y en un tiempo especifico regresar por ella, antes tuviste que acostumbrarte a medir cuánta ropa le cabe a la lavadora por ejemplo, pues si le pones demás inundaras el cuarto de lavado si no es que toda la casa.

De lo material y demás..

En el caso de mi novio, estaba indeciso por un tipo de celular, yo le decía que independientemente de cual eligiera sus dedos se adaptarián al aparato o en el mejor de los casos el aparato a recibir las ordenes que él le de y ni se dará cuenta cuando ya lo este dominando (él al aparato) y envíe un sms por segundo.

Claro que habrá costumbres que se formen a base de un largo tiempo, como la forma en que vivimos (nuestra rutina) por ejemplo, si salimos de viaje no será cosa de un par de días en que nos adaptemos incluso a ver el sol del lado oeste cuando en el edificio lo veías salir hacia el poniente, pero otras llegan a ser en cuestión de días como el adaptarte a esa forma de ser que tienen tus compañeros de clase que no podrás cambiar y lo sabes, pero te acostumbras a sobrellevarlos, si decides hacer algún cambio en tu cuarto tal vez al principio te sientas hasta perdido o si te cortas el cabello te sientas alguien más pero al paso de los días nos adaptamos.

Cuando nos cuesta trabajo adaptarnos a algo, es porque nosotros mismos nos rehusamos a hacerlo y nos la pasamos comparando la situación actual con la anterior, que si la otra casa era más grande, que si allá dicen así y aquí no, sin antes hacer el intento por acostumbrarnos.